La despedida de un ser querido |
El día se puso gris, cada alma que le conoció está presente, vistiendo de luto, recordando sus días maravillosos, los días tristes y otros de gran alegría que convivieron, pero sabes que aun está contigo, escucha tus palabras porque vienen de tu corazón y sientes su presencia. Tu mente de pronto te lleva a otros tiempos, tus ojos lloran, tu voz tiembla, tus manos desean despedir a tu ser querido, es un día distinto, hoy se despiden pero no para siempre, ves algo distinto, un atardecer radiante, una lluvia con un maravilloso y gran arcoíris, una luna plateada o una noche llena de estrellas, hay algo que te indicia que se despide de ti.
La muerte, es la única cita que no podemos eludir, pero sabes que no es el fin, porque somos almas, que vuelan a mundos equidistantes, placenteros, maravillosos quizás aun más hermosos que nuestra misma tierra.
Cuando desvanecemos y tomamos ese último respiro, cerramos los ojos, solo para abrirlos en otro universo, somos seres de luz, fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios, somos almas eternas, jamás desaparecemos, porque somos energía.
Quizás nuestra existencia, sea una trampa para nuestra alma, cuando morimos nos liberamos. ¡Quizás, volvemos a ver el paraíso que nos habían arrebatado! Te has puesto a pensar en que somos más que un cuerpo, somos más que eso, no estamos en un cuerpo, el cuerpo está en nosotros. ¡Somos seres radiantes, la muerte no es el fin, sino el comienzo!
Llora tu perdida, pero no sientas tanta tristeza por tu ser querido que se va, pues ha encontrado el camino de la luz, donde todo es energía, vibrando de amor y paz. Los ángeles, vestidos de túnicas, de colores jamás antes vistos, cantan una melodía, suntuosa, armoniosa, tan hermosa, que te llenarías de emociones indescriptibles, porque reciben a un alma que había bajado a la tierra hace mucho tiempo, para cumplir una misión.
Llora todo lo que puedas, despídete, pero sabes que no es para siempre, sabes que algún día le volverás a ver, vuelve a la vida y cumple tu misión, sabes que Dios está contigo y ahora tienes un ángel que siempre te acompaña. Cuando se cumpla tu cita, te brindará su mano para que asciendas al mundo de los dioses, donde pertenecemos todos.
1 comentarios:
Gracias por el comentario.A todos aquellos que hemos perdido a un ser muy querido,nos consuela leerla.Nos ayuda a mitigar tanto dolor.Como dijo San Agustin "NO LLORES,SI SUPIERAS LO QUE ES EL CIELO.Te estare´esperando
Gracias!